¿Has oído hablar del café caracolillo? El árbol del cafeto produce una fruta conocida como cereza del café, la cual está conformada por dos semillas. No obstante, el caracolillo es diferente porque tiene una semilla dentro de la cereza.
Esta diferencia no cambia el sabor del café, ya que simplemente es un defecto genético, pero, el café caracolillo puede llegar a ser más denso que el café normal. Esto se debe a que tiene un solo grano de café en donde se acumula una mayor cantidad de nutrientes.
El café caracolillo se extrae de la planta junto con los otros granos de café y luego pasa por el procesamiento y despulpa, y al igual que el resto de los granos de café, pasa por un proceso de secado y clasificación por tamaño. En esta etapa, el café caracolillo se separa del resto del grupo, y al ser poco común, se obtiene en pequeñas cantidades.
Durante el secado, se eliminan los defectos del café a través de un mecanismo de clasificación, en el que se utilizan procesos mecánicos, ópticos y manuales. Solo en el momento de la selección se utiliza maquinaria especializada.
Este paso de clasificar el café es de suma importancia, ya que al obtener un café homogéneo con la misma densidad se conseguirá una taza más balanceada.
Después del secado del caracolillo, se lleva al área del tostado; ell café caracolillo es más denso que el café normal, de modo que es necesario ser más cuidadoso durante el proceso de tostado. El tostador debe tener experiencia para tostar un grano de café caracolillo, puesto que está modalidad de café rueda con mayor facilidad en la cámara de tostado.
El caracolillo puede llegar a ser un café homogéneo e intenso, tanto en sabor y aroma como en nivel de acidez, lo que lo convierte en un café muy especial y diferente, tanto en forma como en características organolépticas. Si tienes la oportunidad de tomar café caracolillo molido, comenta tu experiencia en nuestras redes sociales.
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